Funcionarios de la administración Biden intentan expandir una vez más la política para aumentar las expulsiones de solicitantes de asilo de Cuba, Nicaragua y Haití, incluso mientras los abogados de la administración de Biden luchan para poner fin a una cruel política antiinmigrante que se ha utilizado millones de veces para expulsar a los solicitantes de asilo politico.
Según Reuters, los funcionarios de la administración planean implementar nuevas regulaciones para los solicitantes de asilo bajo el Título 42, siguiendo el modelo de la expansión de la política de la administración para los venezolanos.
Defensores de inmigración han condenado como inhumana la política hacia los solicitantes de asilo venezolanos que huyen de la violencia política y una crisis humanitaria.
El Departamento de Seguridad Nacional ha utilizado esta política para expulsar a miles de venezolanos, obligándolos a soportar condiciones peligrosas en México, donde enfrentan amenazas de violencia y secuestro, así como una escalada de disturbios fronterizos que el Título 42 solo ha exacerbado.
En su informe de diciembre sobre el Título 42, Human Rights First calificó la denegación de protecciones a los solicitantes de asilo como una “violación flagrante” de las leyes estadounidenses sobre refugiados.
Los defensores también han criticado la aplicación desigual de las prohibiciones de inmigración y asilo a personas de países como Venezuela como evidencia del racismo que subyace a tales políticas.
A los defensores de inmigración les preocupa que las nuevas reglas tengan efectos comparables en cubanos, nicaragüenses y haitianos, y han criticado duramente a Biden por la expansión.
“Ya es suficiente. “Las expulsiones del Título 42 DEBEN cesar, no expandirse”, tuiteó la coalición de derechos de asilo Welcome With Dignity. “[El presidente] debería estar avergonzado. En lugar de defender el derecho legal a solicitar asilo, continúa los ataques de Trump contra los solicitantes de asilo”.
Aunque la administración de Biden ha estado intentando poner fin al Título 42 en los tribunales, sigue aplicando políticas antiinmigrantes inhumanas, incluida la lucha para desestimar las demandas de las familias por la cruel política de separación familiar en la frontera sur y la detención de inmigrantes en prisión.
